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Hacia un desarrollo sostenible
Las materias primas para la fabricación del vidrio son arena de sílice SiO2, carbonato de sodio Na2CO3 y caliza CaCO3, que se encuentran abundantemente en nuestro entorno. El vidrio se obtiene por fusión a unos 1.600 °C de estos compuestos, y para ello es necesaria una gran cantidad de energía.
Cuando el envase de vidrio llega al final de su vida útil y es depositado en el iglú verde, empieza el proceso de reciclaje. El residuo de envase es transportado a una planta de tratamiento de vidrio para ser transformado en calcín de vidrio recuperado, materia prima secundaria, que servirá a los hornos de vidrio para fabricar nuevos envases.
Estos hechos hacen que reciclar vidrio sea una actividad que colabora con el desarrollo sostenible y favorece las generaciones futuras.
Este es nuestro reto y porque creemos en ello, nuestro compromiso es reciclar todo tipo de vidrio, tanto doméstico como industrial.
(Nota: datos sacados de ECOVIDRIO y de Ferver)
Ventajas del proceso de reciclaje de vidrio
El uso de calcín durante el proceso de fabricación de vidrio aporta estas ventajas:
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Se minimiza el impacto ambiental generado en la extracción de la arena fruto de las extracciones mineras, ya que el calcín la sustituye:
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Reciclando 3.000 botellas de vidrio se ahorra más de una tonelada de materia prima.
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Ahorro energético: la temperatura de fusión en el horno disminuye, consiguiendo un ahorro de un aprox. 1% de energía por cada 4% de calcín reciclado que se introduce en el horno como materia prima.
- Con la energía que ahorra el reciclaje de una botella, ¡se podría mantener encendida una bombilla de 100 Watios durante 4 horas!
- Disminución de las emisiones de CO2 a la atmósfera debido a la disminución de la demanda de energía en el proceso de extracción y en el proceso de fabricación.